
Para mi es una de las claves de la felicidad. Cada vez que doy las gracias me ayuda a darme cuenta de la cantidad de cosas, oportunidades, afectos y regalos que recibo cada día.
Cada vez que doy las gracias, me hace darme cuenta de la importancia que tiene ser humilde para vivir relajado y tranquilo.
Yo trato de vivir mi vida sin hacer daño a nadie. Porque lo que envías al mundo y a los demás, eso te será devuelto.
Cada vez que doy las gracias, a otra persona, a las cosas que me suceden o que hago que sucedan, me doy cuenta de que dar las gracias me gusta y me hace feliz.
Y si te ha pasado algo que no te gusta como ha sido mi caso, da las gracias también porque en el fondo nunca sabes a dónde te podrá llevar eso que acaba de pasar…

Porque ni tu ni yo, ni nadie es la misma persona ahora mismo, que la que fue ayer, por eso procuro no darle importancia a lo sucedido, es cosa de nuestro ego, no de nuestra verdadera esencia.
Lo dicho: ¡Gracias por vuestro tiempo en seguir ahí cada día!. Y que sepáis disculpar las molestias.
Jesús Miravalles Gil
No hay comentarios:
Publicar un comentario