28 de julio de 2014

¿QUE ES EL ALMA?

¿QUE ES EL ALMA?
El alma es nuestra esencia, nuestra energía. Es nosotros.
Albergada en nuestro cuerpo durante el tiempo que pasamos en la Tierra, es capaz de entrar y salir de él a su antojo. A diferencia de nuestro cerebro, el alma posee un sinfin de conocimiento y tesoros. El alma, nuestro ser espiritual, tiene características, emociones, la capacidad de aprender y crecer, el potencial para eclosionar, madurar y florecer si la nutrimos. Encarna todo lo que somos, todo lo que hemos sido y todo lo que potencialmente seremos.
Gracias a su cuerpo etérico o espíritu, el alma puede viajar y contactar con los seres queridos que han fallecido, y el recuerdo de dichos contactos nos llega a través de nuestros sueños, sueños que parecen muy reales pero que para muchos son una realidad demasiado dificil de comprender. Los animales tambien tienen alma, y forman parte de nuestro cúmulo de almas. Juegan un papel importante en nuestra experiencia en la Tierra.
Al comienzo de su creación y durante su desarrollo el alma, toda alma que ha existido o existirá en el futuro, está compuesta, rodeada e influida por su propio tipo de energía particular procedente de una fuente de energía elemental particular. En el universo existen cientos, si no cientos de miles, de grupos de energía en los que puede nacer un alma. En el plano terrenal, no obstante solo existen cinco grupos de energía a partir de los cuales se crea toda la vida.

Toda la vida.

Cuando tu alma fue concebida, esa chispa inicial, ese momento crucial de creación surgió de una fuente de energía particular y especial. La chispa es personal, pero el tipo de energía surge de una de las cinco fuentes: fuego, tierra, aire, agua y azufre. Estos son los grupos de energía elementales, las fuentes de energía a partir de las cuales se crean todas las almas destinadas a la Tierra. Cuando tu alma nació, se vio rodeada e imbuida de una energía presente desde el principio de los tiempos, sin la cual no habría creación ni nuevos comienzos. Esta energía determina la apariencia de tu alma y su funcionamiento.
Fuego, Tierra, Aire, Agua y Azufre, el grupo al que perteneces te otorga tu poder, tu personaldiad y los rasgos de tu caracter.
Una persona nacida bajo la influencia del fuego es alguien que actúa movido instintivamente por la pasión, por la emoción, en ocasiones hasta el punto de no ser capaz de frenar esos momentos intensos de pasión y ardor por mucho que lo intente. Esperar que se comporte de un modo diferente sería como intentar encauzar el curso de un volcán en erupción. Imposible.
Una persona nacida bajo la influencia de la tierra es alguien que instintivamente se ve empujado por una necesidad de planear, idear y dirigir, y que no será, de hecho no podrá, ser otra cosa que firme e inamovible una vez haya tomado una decisión. Esperar que se comporte de otro modo sería como esperar que una montaña se reduzca a polvo delante de tus ojos. No ocurrirá.
Una persona nacida bajo la influencia del aire es alguien que instintivamente se ve empujado por un flujo de energía más pasivo y tranquilo y que no será capaz o no querrá imponer su autoridad sobre los demás, puesto que generalmente se trata de una persona extremadamente afable. Esperar que alguien cuyo signo del alma pertenece al grupo del aire sea diferente, sería como esperar que el viento obedezca tus órdenes: un hecho más que extraordinario.
Una persona nacida bajo la influencia del agua es alguien que instintivamente se ve empujado por una necesidad de evaluar y buscar el acuerdo, que apenas podrá hacer otra cosa que no sea dejarse llevar por la marea. Intentar forzarla a comportarse de otro modo será como plantarse en medio de un río e intentar cambiar su cauce. No funcionara.
Existe otro grupo de energía, otra fuerza de la naturaleza que impulsa a algunos de nosotros. Esta fuerza es distinta de las anteriores. La energía del azufre es oscura y desagradable; una persona nacida bajo la influencia del azufre es alguien que instintivamente se deja llevar por la maldad; una persona que no estará dipuesta o no podrá ser más que oscura. Desear el amor o la compasión de una persona nacida como alma oscura, sería como esperar que la medicina más horrible y maloliente resultase tan dulce como un nectar. Nunca sucederá.
Cada uno de nosotros goza de la capacidad de expandir su energía, de desarrollarla y utilizarla de múltiples formas. Lo que no podemos cambiar es el tipo de energía que somos. Cambiarlo es imposible; sería como intentar transformar un pastel de chocolate en una tarta de fresa. Los ingredientes que componen el alma, la fuente de su poder, siempre serán los mismos.
Sin embargo, la forma o configuración del alma varía dependiente de tus necesidades. Puede ser tan grande como el cuerpo humano que la alberga o tan pequeña como su más diminuto nervio. En algunos momentos, nuestras almas se comunican entre sí. En ocasiones somos conscientes de que eso ocurre, como cuando sentimos una conexión intantánea con alguien. Este sentimiento, negativo o positivo, es algo que percibimos de un modo instintivo. Otras veces puede que no seamos conscientes de dicha conexión pese a que exista.
De algun modo, nuestra alma posee ojos y oidos; ve, escucha, presta atención a sus experiencias. Somos nosotros, los mortales, distraídos por los aspectos materiales y mundanos, los que necesitamos estar más atentos a la energía de nuestra alma. El alma determina todo lo que podemos ser, pero nosotros, los mortales, elegimos en gran medida en qué nos convertimos. Aprendiendo acerca de nuestro grupo de energía elemental y nuestro signo específico del alma, nuestra alma, podemos descubrir y alcanzar nuestro destino más alto.

Rosemary Altea

*Reflexión*

El alma es nuestro tesoro mas preciado, ya que nacida de la fuente divina nos mantiene en infinita comunion con Ella, mas alla de la humanidad y más alla de las leyes terrestres, por eso, nos resulta tan dificil comprender nuestro Ser.
Hay que abrir el corazón, despertar las conciencia y quitarnos el velo de los ojos para poder Ser quienes somos.
Ser es la acción, es la misión que las almas hemos escogido en la Tierra. El tiempo se ha cumplido y es el momento de reunirse con nuestras familias para crear una vibración constante de amor incondicional ,que ilumine a todos por igual, con la mas bella luz divina de nuestro Creador Dios.

                                           enlace. http://www.sabiduriadelaluz.org
Jesús Miravalles Gil
                                      

No hay comentarios:

Publicar un comentario