
El pobre materialmente no tiene posesiones, no acumula, tiene necesidad....
El pobre en Espíritu... es aquél que nada posee, no acumula... no tiene excesiva complacencia consigo mismo... Nada posee, pues comprende que nada le pertenece a nivel último... y también a nivel inmediato pues todo en un momento dado puede desaparecer de su -nuestra- vida y serle -sernos- arrebatado...: salud, trabajo, relaciones personales, amigos, família, pareja.... Comprende la impermanencia y como consecuencia de ello, es desprendido... relativiza las cosas que utiliza aún dándoles el valor y significado adecuado -una cosa no quita la otra-.. relativiza esas relaciones aún relacionandose con ellas a nivel de Amor... Relativiza ese sufrimiento de esta vida -que tanto nos persigue- pues comprende que todo lo genera la mente... y no hay tantos culpables como podría parecer.

Vuestro es El reino de los Cielos... Un Reino que Jesús siempre hace referencia... una comprensión difícil para aquél que no ha tenido la experiencia de la Unidad Interna.
Pues ese Reino.... es una dimensión que vive en cada uno... es Paz, Alegria, Gozo, Sabiduria, Amor, Claridad, Conciencia Y Consciencia. Es Luz, nuestra Esencia Iluminada.
Que ese Reino, hermanos... nos ilumine para poder entrar en él... que seamos dignos y capaces de ir alejando esa ignorancia que nos mantiene en esa mente condicionada... esclava de razones, conceptos, juicios, educación, creencias....
"BIENAVENTURADOS LOS POBRES, PORQUE SER RICO ES APOSTAR POR LA MISERIA"
Jesús Miravalles Gil Mendigo pidiendo limosna... ¡con gracia!
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