REGALOS DE MI INFANCIA

¿Hay algo más bonito que la cara de un niño cuando abre un regalo?. Supongo que todos hemos experimentado esa alegría al ver la sonrisa y los nervios de nuestros hijos, la mañana del día de Reyes o el día de su cumpleaños, pero desgraciadamente, no todos los niños tienen esa suerte, la vida es injusta, el mundo no es igual para todos.
Tengo que confesar que me gusta mucho recordar aún a pesar de los años transcurridos  con gran emoción aquellos regalos de Reyes de mi infancia, transcurría la ya lejana década de los años 60. Recuerdo con gran emoción el impacto que me produjo al ver aquel paquete de regalo tan grande, que sobresalia de los demás, en aquella mañana de Reyes de mi infancia.
Al desenvolver el envoltorio, mi expectación fue en aumento ante aquella inmensa y colorida caja de cartón, en la que se podía leer  en letras grandes “JUEGOS REUNIDOS GEIPER”
Era un regalo de mi madre, allí dentro se encontraba un sinfín de juegos y pasatiempos con todo tipo de fichas y dados de todos los colores para su ejecución.

Desde los más clásicos y populares como el Parchis, Las tres en raya, La oca, el ajedrez (que allí se denominaban “Barra China”, y los otros más mundanos como la Ruleta, los Dados de Poker y por supuesto, los originales made in Geyper: que eran muy divertidos con tableros de cartón ilustrados con expresivos y simpáticos dibujos a todo color.
Los había para todos los gustos, sobre el circo, carrera de coches, el malicioso juego de la escalera, el aventurero juego “En busca del Tesoro”.
La verdad es que todos venían a ser, prácticamente lo mismo: había que seguir un casillero numerado hasta alcanzar la meta, con la ayuda de fichas y dados.
Aquellos juegos despertaban ecos en nuestro interior te convertías en un intrépido explorador a través de mil y un peligros…Y es que, sin duda alguna tenemos que reconocer que todos somos buscadores en estado más o menos activos, pero buscadores al fin. En esta vida podríamos decir que no hay nadie que poco o mucho, no este buscando algo. ¡Es así! . Y forma parte de nuestra naturaleza.
En fin, hoy muchos niños abren sus regalos ilusionados porque sea una “Play” o una Xbox”. Pero los que superamos los 50 y echamos la vista atrás recordamos  que hace años eran otros los regalos que todos queríamos  tener.

Muchas gracias por vuestro tiempo en seguir este blog, agradecer no cuesta nada.

Jesús Miravalles Gil
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